Después de reconocer que el comercio fue el responsable de liderar el crecimiento de la economía colombiana en el tercer trimestre de 2015, al contribuir con un 4,8 por ciento anual, EL COLOMBIANO recogió diversos puntos de vista para saber si esta tendencia seguirá en 2016.
Sin embargo, primero hay que destacar que la actividad comercial incluye no solo las tiendas, también cines, restaurantes, hoteles, comercio online, ventas por catálogo, domicilios y otras formas de compras que van apareciendo.
Para Camilo Herrera, presidente de Raddar, el comercio acabará bien este 2015 con un crecimiento del 4,9 por ciento y para 2016, seguirá creciendo al 5 por ciento.
En esta proyección sobresalen las ventas de bienes durables que crecerán el próximo año al 6 por ciento y entretenimiento, que lo hará al 10,7 por ciento, según las proyecciones de Raddar.
“El próximo año será bueno para el comercio por tres razones fundamentales: el dólar dejará de moverse tanto, la inflación bajará y la gente comprará lo que no ha comprado porque tenía temor cambiario”, aclaró Herrera.
Uno de los elementos que explica esto es que la divisa norteamericana oscilará entre 3.000 y 3.500 pesos el próximo año, una devaluación de 17 por ciento, mientras que la de este año ha estado en un 50 por ciento, generando más incertidumbre.
Las proyecciones muestran tendencias positivas, al punto que es posible que la venta de carros nuevos crezca y la confianza del consumidor y los diferentes índices que midan el comportamiento del consumo serán mejores.
En toda esta dinámica, “será positivo el impacto que tendrá el dólar, reiterando que la actividad tiene un mix de productos: importados y no importados”, añadió Herrera.
No obstante, según las proyecciones el comercio no será el que jalone el Producto Interno Bruto del país en 2016, será el gasto de los hogares el que lidere (ver gráfico).
Por su parte, Rosmery Quintero Castro, presidenta ejecutiva de Acopi Nacional, resaltó la dinámica que continuarán teniendo los hoteles y restaurantes, donde “nosotros como industria manufacturera, que proveemos productos para estos sectores, nos veremos beneficiados. Además con un dólar apreciado el consumidor final va a preferir lo colombiano”.
Sin embargo, reconoció la ejecutiva que no puede haber un optimismo desbordado porque la inflación hay que mirarla siempre de reojo, como una de las principales amenazas.
De otro lado, Rafael España, director de investigaciones económicas de Fenalco Nacional, indicó que el próximo año será retador para el comercio porque “habrá que apaciguar las voces pesimistas, dadas las condiciones para un buen desempeño. El dólar favorecerá en mayor medida tres zonas del país: Eje Cafetero y las fronteras con Venezuela y Ecuador”.
Tomado de EL COLOMBIANO
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